Entradas

Mostrando entradas de mayo, 2011

Sobre el desierto

Todos necesitamos un lugar donde fundirnos con nosotros mismos, donde elevarnos por encima de la burda materia buscando la esencia de la que están hechos los sueños, a mitad de camino entre las estrellas y el horizonte. Este blog nació como mi propio espacio, como mi lugar donde perderme entre mis letras, sin buscar mucho si hilarlas trenzadas o con pliegues de seda. Así nació mi desierto, un espacio infértil, sin más ni menos que la noche, preñada de estrellas que centellean en lo alto. Y pensaba que era el mejor lugar al que escaparse de todo, donde buscarme en mis propias sombras, donde mirarme en el mismo de reflejo del contorno de unos labios que no saben hacer otra cosa que amar. Buscan saciar su sed de ti, de palabras que elevan mi espíritu a la altura de los sueños, entre el horizonte y las estrellas. Que se pierden en las dunas, que ya no son dueñas de mis silencios, sino de mis encrucijadas. De esta tierra estéril se asomaron a la luz de las estrellas varias historias, algún

Hispania

Imagen
Me levanto una mañana y mi chica me cuenta, entusiasmada cómo un grupo de gente sin ideología política definida ha acampado en Sol pare reivindicar una democracia real. Yo, cansada del carácter español, de tanto hablar para nada, de sentarse a ver televisión y enfadarse desde el sillón de casa, me quedo un tanto atónita. No doy mucho crédito y continúo preguntándome dónde estarán los ideales por los que el rojo de mi abuelo se echó a una guerra de la que no sacó ningún tipo de honor, pues se luchaba por la libertad de su pueblo. Pasan las horas y las notícias acerca de la acampada en la puerta del Sol van acelerándose en la red. Los manifestantes se han hecho oír. Para vivir esto desde casa, a través de la televisión, decidimos acercarnos el viernes, pues mejor buscar un momento en el que aparcar un poco nuestras responsabilidades. Y así, me voy de camino al trabajo, dándole vueltas en mi cabeza, pensando en todas las leyes de reformas educativas por las que he salido a la calle, lo

Éter

Imagen
De día la hierba fresca, besada por el suave rocío de la mañana, parece agua. Se funde con esa luz del sol que se atreve a despertar al mundo. Lo que de noche es una negra extensión de césped, como si de una placa de obsidiana se tratara, de turbias intenciones para con mi subconsciente, releo en los renglones que los Dioses han puesto ante la ventana, para mi, el momento exacto en el que me encuentro. Y me sorprendo a mi misma pensando "éste sería un buen momento para fumar". Si fumara, claro está. Pero ¿qué importan mis pulmones ante la hierba convertida en río? pues los árboles merodean a su alrededor, cercando lo que a mediodía es verdor puro, para engañar a mis sentidos. Una vez más, sola ante los laberintos de la vida. ¿Qué importa la tragedia de ser humano? o tan siquiera, un ser humano que desea convertirse en humo, buscando llenar sus pulmones. Si sigo mirando al horizonte, veo las montañas que recortan el comienzo de la luz, esa blanca transición entre la muerte d